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Patatas con mantequilla y ajo: la receta de patatas crujientes y sabrosas

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Cómo hacer patatas con mantequilla y ajo
Corta las patatas en gajos. Cúbrelas con agua fría y déjalas en remojo durante media hora. Hierve las patatas en agua fresca durante unos 7 minutos. Escúrrelas y reserva. Ahora prepara la mezcla de harina. Bate la harina, la sal, el orégano, el chile en polvo y la pimienta negra. Añade el agua y bate bien hasta formar una masa fina. Asegúrate de que no queden grumos. Añade los gajos de patata enfriados a la masa de harina y asegúrate de que cada gajo esté cubierto con la masa. Calienta el aceite en una sartén grande y añade los gajos (no llenes demasiado la sartén). Fríe hasta que estén dorados y deja escurrir sobre toallas de papel. En un bol aparte, mezcla la mantequilla derretida con el perejil picado y el ajo. Vierte sobre los gajos de patata fritos y mezcla.

Consejos para preparar las mejores patatas con mantequilla y ajo
– Para obtener patatas más crujientes, utilice patatas Yukon Gold, Russet o rojas.

– Para que las patatas queden más crujientes , deja reposar las patatas sancochadas durante un rato. Esto las enfriará y dejará de generar vapor. Si no se enfrían bien, el vapor impedirá que queden crujientes.

¿Qué acompañar con papas con mantequilla y ajo?
Estas papas combinan con casi cualquier cosa. Sírvalas con un estofado o pollo asado , o incluso como una guarnición sabrosa para sus hamburguesas . También puede servirlas como aperitivo con una guarnición de salsa alioli .

Cómo conservar las patatas con mantequilla y ajo
Estas patatas se sirven mejor directamente de la freidora, ya que perderán su textura crujiente si se almacenan. Si quieres prepararlas con antelación, puedes hervirlas y guardarlas en el frigorífico hasta 3 días . La masa también se puede guardar en un recipiente hermético en el frigorífico. Enfríelas cuando estés listo para servirlas.

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