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Nunca escurras la pasta en el fregadero.

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A la gente de todo el mundo le gustan mucho las preparaciones de pasta, y muchos las preparamos al menos una vez a la semana, si no más. Mientras la preparas hay que tener mucho cuidado de cocinar la pasta hasta que esté al dente para seguir el plato de pasta perfecto. El agua en la que se hierve la pasta también es de gran importancia y debe conservarse para utilizarla posteriormente en el plato. Siga leyendo para saber por qué.

A la gente de todo el mundo le gustan mucho las preparaciones de pasta, y muchos las preparamos al menos una vez a la semana, si no más. Mientras la preparas hay que tener mucho cuidado de cocinar la pasta hasta que esté al dente para seguir el plato de pasta perfecto. El agua en la que se hierve la pasta también es de gran importancia y debe conservarse para utilizarla posteriormente en el plato. Siga leyendo para saber por qué.

El agua de la pasta es de gran importancia a la hora de preparar el plato de pasta y no debe escurrirse después de cocinar la pasta en ella. ¡Al drenar esta valiosa agua, pierdes la oportunidad de convertir tu pasta diaria en un plato digno de un restaurante!

Sucede que la pasta se prepara con harina y mientras se cuece la pasta en agua, de la pasta sale almidón que convierte el agua hirviendo de la pasta en un líquido blanco y turbio. Esta agua de pasta turbia es de gran valor para espesar y emulsionar la salsa para pasta.

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Para explicarlo más, ¿recordáis cuántos hemos visto un plato de pasta con un aspecto delicioso pero con un charco de agua alrededor del borde? Pues este charco es el resultado de la separación de moléculas de aceite y agua en ausencia de un emulsionante.

El almidón del agua de la pasta actúa como agente emulsionante y espesante y combina los dos líquidos o moléculas repelentes para crear una mezcla homogénea o lo que conocemos como la salsa para pasta suave y cremosa. Además, algunos creemos que esta valiosa agua aporta sabor al plato de pasta y lo hace más atractivo.

También puedes optar por no juagar la pasta para tener una buena capa de mididón que ayude a unir la pasta a la salsa. Si prefieres comer pasta preparada con otra variedad de granos, como muchos tipos de arroz, lentejas, frijoles, etc., igualmente puedes usar agua de la pasta para cocinar, ya que todavía tendrá moléculas de almidón presentes.

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