Serví este plato para una reunión y los invitados no dejaban de hablar maravillas.

No hay nada mejor que sentarse en el porche en una tarde cálida y relajante con un vaso de té dulce de fresa casero en la mano. Esta receta tiene raíces profundas en el Medio Oeste, donde abundan tanto la hospitalidad como las fresas. Es una versión refrescante del té dulce tradicional y prepararlo siempre me lleva a mi infancia cuando recogíamos fresas frescas del jardín. Es perfecto para reuniones familiares, cenas dominicales o simplemente para un momento de tranquilidad para usted.
El té dulce de fresa combina maravillosamente con refrigerios ligeros por la tarde. Pruébelo con sándwiches como ensalada de pepino o pollo, o con bollos recién horneados. Es especialmente refrescante en los días calurosos, servido con una buena cantidad de hielo y una ramita de menta fresca como guarnición. Si organiza una reunión de verano, este té combina maravillosamente con platos a la parrilla y ensaladas de la huerta. Porciones de
té dulce de fresa
: 8 porciones
Ingredientes

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