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Cuando los invitados sorpresa eran tan comunes como los dientes de león en un prado primaveral, los campesinos necesitábamos un plan de hospitalidad a prueba de fallos. Las galletas predicadoras, también conocidas como “galletas sin hornear” o “empanadas de vaca”, tienen su origen en esta misma tradición. Cuando el predicador lo visitó sin previo aviso, estas delicias rápidas fueron la respuesta para servir algo dulce sin la necesidad de un horno caliente o una despensa llena de ingredientes sofisticados.
Se dice que la receta nació por necesidad, pero desde entonces se ha transmitido de generación en generación y alrededor de las mesas de la cocina, y cada familia le ha añadido su propio toque amoroso. Es posible que desees hornear estas sabrosas galletas porque, al igual que una buena historia, no requieren mucho (algunos alimentos básicos de la despensa y un poco de paciencia) y no requiere mucho esfuerzo hornearlas. Ya sea que tenga compañía o tenga ganas de algo dulce para usted, estas galletas predicadoras seguramente lo satisfarán.
Combine estas galletas fáciles de hornear con una taza de café humeante o un vaso alto de leche fría. Si se los va a servir a otras personas, podría considerar un plato con rodajas de manzana o plátano para complementar la sabrosa avena y el chocolate. Pero, sinceramente, cariño, estas galletas se mantienen bastante bien. Porciones
de galletas Preacher sin hornear
: Rinde unas 24 galletas
Ingredientes
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