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Prepara el calabacín:
Ralla el calabacín en un bol grande. Espolvorea una pequeña cantidad de sal sobre el calabacín rallado y déjalo reposar unos 10 minutos para eliminar el exceso de agua.
Escurre el exceso de humedad:
Después de 10 minutos, exprime los calabacines con un paño de cocina limpio o una gasa para eliminar el exceso de líquido. Este paso es crucial para que el plato final no quede demasiado aguado.
Mezclar los ingredientes:
En un bol aparte batir los huevos y luego añadir el queso rallado, el cebollino picado, el eneldo, el tomillo, la pimienta negra y una pizca de sal. Mezclar bien.
Combine las mezclas:
agregue el calabacín escurrido a la mezcla de huevo y revuelva bien. Agregue gradualmente la harina y el polvo para hornear y revuelva hasta que se forme una consistencia espesa, parecida a una masa.
Cocine la mezcla de calabacín:
Caliente una cantidad generosa de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Vierta la masa de calabacín en el aceite caliente y presione suavemente para formar hamburguesas. Freír cada lado hasta que estén dorados, aproximadamente de 3 a 4 minutos.
Sirve y disfruta:
Después de freír, coloca las hamburguesas de calabacín en un plato forrado con toallas de papel para escurrir el exceso de aceite. Sirva caliente, espolvoreado con queso rallado adicional si lo desea.
Conclusión
Esta receta de calabacín es un verdadero consejo experto y muestra la versatilidad y el delicioso sabor de la verdura. La combinación de hierbas frescas, queso y la cantidad perfecta de especias crea un plato sabroso y abundante. Ya sea como guarnición, merienda o comida ligera, esta receta de calabacín seguro te impresionará. ¡Pruébalo y verás qué rápido se convierte en un elemento básico en tu cocina!
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