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Instrucciones:
Precaliente el horno a 350 °F (175 °C) y cubra una fuente para hornear de 9 × 13 pulgadas con papel pergamino para retirarlo fácilmente.
En un bol, bata 1¾ barras de mantequilla y el azúcar en polvo hasta obtener una mezcla suave y esponjosa.
Mezcle gradualmente el cacao en polvo y la harina hasta que estén bien combinados.
Presione la masa uniformemente en el molde para hornear preparado y hornee durante 15 minutos.
Mientras se hornea la masa, derrite las 2 cucharadas restantes de mantequilla con la leche condensada azucarada en una cacerola a fuego medio. Revuelve constantemente hasta que la mezcla espese, luego agrega el extracto de vainilla.
Vierta esta mezcla sobre la masa horneada y vuelva a colocarla en el horno durante 8-10 minutos más.
Mientras tanto, tuesta ligeramente las nueces y luego pícalas en trozos grandes. Reserva.
En un recipiente apto para microondas, derrite los trocitos de caramelo con la nata espesa, revolviendo hasta que quede una mezcla homogénea. Incorpora las nueces tostadas y la sal a la mezcla de caramelo.
Extiende la capa de caramelo de nueces sobre las barras y déjalas enfriar completamente antes de cortarlas.
Estas barras masticables con sabor a ardilla no son solo un regalo para los humanos, sino que simbolizan una dulce conexión con la vida silvestre que inspira alegría y asombro en nuestras vidas. Disfrute de la elaboración de estas deliciosas barras y quizás comparta un momento de aprecio por las ardillas y el mundo natural que nos rodea.
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