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Harina y agua hirviendo ¡la delicia especial para acompañar el mate!

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Preparación

  1. En una olla grande, vierte el agua y llévala a hervir a fuego medio.
  2. Agrega la harina poco a poco, mientras revuelves constantemente para evitar grumos.
  3. Incorpora la sal y el azúcar a la mezcla y continúa removiendo hasta que la harina esté completamente integrada.
  4. Una vez que la mezcla esté suave y homogénea, retira la olla del fuego.
  5. Transfiere la masa a una superficie limpia y comienza a amasarla durante 8-10 minutos, hasta obtener una textura elástica y manejable.
  6. Forma la masa en una bola y déjala reposar durante 10 minutos para que se asiente.
  7. Luego, divide la masa en porciones del tamaño deseado y dale la forma que prefieras: puedes hacer panecillos individuales o también lo podes estirar como se puede ver en el video.
  8. En una sartén grande, calienta un poco de aceite a fuego medio y coloca los panes.
  9. Fríe los panes hasta que estén dorados y crujientes por ambos lados, asegurándote de voltearlos regularmente para que se cocinen de manera uniforme.
  10. Una vez listos, retira los panes de la sartén y déjalos reposar sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  11. Sirve los panes calientes y disfrútalos como acompañamiento de tus comidas favoritas o simplemente como un delicioso bocadillo.

Consejos

  1. Controla la temperatura del agua: Asegúrate de que el agua esté lo suficientemente caliente para activar la harina sin que hierva.
  2. Mezcla gradualmente la harina: Agrega la harina poco a poco mientras revuelves para evitar grumos.
  3. Amasa correctamente: Dedica 8-10 minutos a amasar para desarrollar el gluten y lograr una textura elástica.
  4. Deja reposar la masa: Permite que repose al menos 10 minutos para asentar los ingredientes.
  5. Controla el fuego al freír: Mantén el fuego medio para un dorado uniforme.

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