¡Simplemente se derriten en tu boca! ¡Las delicadas galletas italianas están listas en veinte minutos!

1. Tamizar la harina, el almidón, la sal y la levadura en un bol, añadir el azúcar, la mantequilla fría y frotar los ingredientes con las manos hasta obtener una masa quebradiza.
2. Agrega el huevo y amasa la masa hasta que quede suave y no pegajosa. Envuélvelo en un film y mételo en el frigorífico durante 20-30 minutos.
3. Mezclar el mascarpone con el huevo, la piel de limón, el almidón y el azúcar hasta obtener una composición homogénea.

Consejo. El queso mascarpone se puede reemplazar con ricotta, crema hervida, crema agria vertida durante la noche o queso graso frotado a través de un colador.

4. Espolvorea la superficie de trabajo con harina, transfiere la masa y extiéndela sobre una superficie fina.
5. Cortar círculos con un diámetro de 8-10 cm.
6. Tome un círculo de masa, agregue aproximadamente 1 cucharadita de relleno y cubra con un segundo círculo de masa. Pellizque los bordes con los dedos y luego con las puntas de un tenedor.
7. Transfiera las galletas a una bandeja para hornear cubierta con papel de horno y hornee durante 20 minutos en un horno calentado a 180°C, hasta que estén doradas en la base, pero queden claras en la superficie.

Consejo. Las galletas se agrietan en la superficie o puedes hacer una pequeña hendidura en el medio antes de colocarlas en el horno.

8. Espolvorea abundantemente las galletas con azúcar glass, en varias capas.

Quedan tiernos y se deshacen en la boca, ¡y la crema es perfecta!

¡Le deseamos un agradable apetito en el círculo de sus seres queridos!

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