Receta de Pan de Ajo y Mozzarella una delicia

Instructions

1. En un tazón grande, vierta la harina, la masa madre, el azúcar, el huevo batido, la mantequilla derretida, la leche de almendras y la sal. Mezclar todo con una espátula de madera.

2. Sobre una superficie plana, espolvorea un poco de harina y coloca sobre ella la masa para amasarla. Poner harina en las manos si es necesario para que la masa no se pegue. Forme una bola redonda, luego cúbrala con una toalla limpia. Deje reposar de 1 a 2 horas.

3. Corta la mozzarella en rodajas, luego comienza a preparar la mantequilla de ajo. Para hacer esto, debe poner la mantequilla ablandada en un tazón, luego picar la cebolla verde y el diente de ajo que necesita agregar a la mantequilla. Agregue sal y pimienta y mezcle todo junto.

4. Una vez que la masa esté bien leudada, aplanarla con la palma de la mano sobre una superficie enharinada. Cortar el pan con un cuchillo en tiras de 1 cm sin cortar la base.

5. Voltee el pan y rebane de la misma manera para obtener una rejilla. Con una brocha, pincelar la masa con la yema de huevo.

6. Extienda la mezcla de mantequilla de ajo sobre toda la superficie del pan con una cuchara. Luego deslice las rebanadas delgadas de mozzarella en los intersticios.

7. Precalentar el horno a 180°.

8. Coloque el pan en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Coloque en el horno y cocine durante 25 a 30 minutos.

9. Después de hornear, ponga el pan en una fuente y déjelo enfriar antes de disfrutarlo. Sepa que incluso se puede comer con la mano o servir como aperitivo en platitos para acompañar berenjenas, calabacín a la plancha, pimientos, tomates frescos o tomates cherry, calabacín, atún, salmón, gambas o espinacas. También se puede servir con salsa de tomate para los amantes de los platos picantes y ácidos.

10. Es posible variar el sabor del pan según la elección. Puedes añadir tomillo, cebollino, cilantro, romero, orégano o hierbas provenzales.

11. Para conservarlo, este pan se puede poner en la nevera durante 3 días o incluso congelar para un almacenamiento más prolongado.