Plato de berenjenas sin freír

Corta la berenjena en rodajas de 1/2 pulgada de grosor. Colócalas en una bandeja para horno, unta ambos lados con aceite de oliva y sazona con sal, pimienta, pimentón dulce y orégano.
Hornee en horno precalentado a 200°C (400°F) durante 25-30 minutos o hasta que estén tiernos y ligeramente dorados.
Prepara el relleno:

Mientras se cocinan las berenjenas, calentamos un chorrito de aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Saltee la cebolla, los pimientos y el ajo hasta que estén tiernos.
Agrega la carne picada partiéndola con una cuchara. Sazone con comino, jengibre, cilantro, sal y pimienta. Cocine hasta que la carne esté dorada.
Agrega el puré de tomate y el agua. Deja que la mezcla se cocine durante unos 10 minutos, hasta que espese un poco. Agrega el perejil picado.
Armar el plato:

Coloque la mitad de las rodajas de berenjena asadas en una fuente para horno. Cúbrelas con la salsa de carne y luego coloca encima las rodajas de berenjena restantes.
Espolvorea la mozzarella y el parmesano rallado sobre la capa superior de berenjena.
Horneando:

Coloque la fuente para hornear ensamblada nuevamente en el horno. Hornee a 190°C durante 20-25 minutos, o hasta que el queso esté burbujeante y dorado.
Atender:

Deje que el plato se enfríe un poco antes de servir. Este pastel de berenjena es delicioso solo o acompañado de una guarnición de pan crujiente o una ensalada ligera.
Disfrute de los ricos y reconfortantes sabores de este plato de berenjena sin freír, un testimonio de la versatilidad y delicia de la berenjena. Perfecta para sorprender a los invitados o satisfacer el apetito de su familia, esta receta seguramente se convertirá en una querida adición a su repertorio culin