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El poder de la sal
La sal es un agente limpiador natural con una amplia gama de usos. Ya en la antigüedad se utilizaba para diversos fines. Echando una solución salina por el desagüe cada noche antes de acostarnos, podemos combatir eficazmente los depósitos y los olores desagradables.
Cómo usar sal en el desagüe
Para limpiar el desagüe, puedes añadir unos 200 gramos de sal fina directamente al desagüe o utilizar una mezcla de 120 gramos de bicarbonato de sodio y 200 gramos de sal. Deje esta mezcla durante la noche y luego enjuáguela con agua hirviendo a la mañana siguiente.
Si toma este sencillo paso todos los días antes de acostarse, podrá mantener los desagües libres de residuos y funcionando sin problemas. Esto no sólo le ahorra tiempo y dinero en la limpieza profesional de tuberías, sino que también contribuye a la salud a largo plazo de sus sistemas de plomería.
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