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Los secretos del cuidado de las orquídeas: cómo hacer florecer esta exótica belleza
La orquídea es sin duda una de las plantas más vendidas a nivel mundial. A menudo se regala como símbolo de buena suerte en la inauguración de una nueva casa o simplemente se compra personalmente porque sus colores y flores ofrecen un espectáculo extraordinario.
Sin embargo, la orquídea no es sólo una de las plantas más vendidas, sino también una de las más difíciles de cuidar. A menudo estas pequeñas joyas verdes se quedan sin flores o florecen mal.
Sin embargo, la falta de floración se puede remediar dándoles a las plantas amor, cuidado y mucha atención. En primer lugar, debes saber que la luz solar directa no siempre es la mejor solución para una orquídea sana.
La luz solar directa puede provocar que las flores y las hojas se quemen y la planta enferme. El consejo de los expertos es colocar la orquídea en un lugar cálido y luminoso, pero alejado de la luz solar directa.
También se requiere precaución al regar. No es necesario regar la orquídea todos los días, pero sí debes aprender a controlar la humedad del suelo: si está lo suficientemente húmeda, la orquídea no necesita más agua.
Incluso regar en exceso puede hacer que la planta se enferme y deje de florecer. Después de darte estos pequeños consejos, pasemos al plato principal. Hoy te desvelamos el secreto de cómo tu orquídea crece sana y fuerte durante todo el año y, sobre todo, produce muchas flores rápidamente. Así es como debes plantarlas para lograr estos resultados.
No te pierdas la continuación en la página siguiente.
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