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¡Nunca vuelvas a comprar tomates! ¡Gracias a estos métodos sencillos y originales podrás cultivarlos en tu propio jardín!

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Paso 2: Cortar los tomates maduros

Selecciona unos cuantos tomates maduros y córtalos en rodajas no muy finas. No es importante hacer rodajas bonitas, sino uniformes.

Paso 3: Plantar las rodajas de tomate.

Coge la olla preparada y coloca en ella las rodajas de tomate. Cúbrelos con una fina capa de tierra y riega ligeramente. El objetivo es mantener las rodajas de tomate bajo una capa de tierra sin enterrarlas profundamente.

Paso 4: trasplantar las plántulas de tomate

Después de dos semanas, las semillas de tomate germinaron bien y produjeron plantas jóvenes con algunas hojas. Coloque la maceta en un lugar soleado que reciba luz solar directa de 10 a 12 horas al día. Esto promueve el crecimiento de las plántulas jóvenes.

Después de otras dos semanas, sus plantas de tomate estarán lo suficientemente fuertes y listas para ser trasplantadas en macetas separadas. Entierra bien los tallos en la tierra y luego riégalos ligeramente. Coloque las macetas individuales en un lugar soleado y no olvide regar las plantas con regularidad.

Si cuidas bien tus plantas, podrás cosechar tomates maduros al cabo de 2 o 3 meses. Deje que sus plantas de tomate crezcan en paz y disfrute de una rica cosecha.

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