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¡El mejor pastel que he comido! ¡Te sorprenderá! Receta fácil y rápida

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Precalienta el horno a 180°C (350°F).
Separa 2 huevos medianos. Batir las yemas con una pizca de sal.
Añade poco a poco 60 g de azúcar sin dejar de batir hasta que esté suave y cremoso.
Tamizar 50 g de harina común y 10 g de cacao. Mezclar hasta que esté bien combinado.
En un recipiente aparte, bata las claras hasta que se formen picos rígidos.
Incorpora suavemente las claras a la mezcla de cacao.
Vierte la masa en un molde de 20 cm y hornea durante unos 25-30 minutos o hasta que al introducir un palillo éste salga limpio.
Deja enfriar el pastel.
Para remojar:

Combina 160ml de café con 2 cucharaditas de azúcar. Déjalo enfriar.

Para la mousse de chocolate:
Derretir 200 g de chocolate negro con 100 g de mantequilla a baño maría. Agrega 20ml de café y mezcla bien.
En un bol aparte, bata 4 huevos con 40 g de azúcar hasta que queden esponjosos.
Incorpora poco a poco la mezcla de chocolate derretido a los huevos batidos.
Unte la mousse de chocolate sobre el bizcocho enfriado.

Para la ganache de chocolate:

Calentar 60 g de chocolate negro y 40 ml de leche en un cazo hasta que quede suave.
Vierte la ganache de chocolate sobre la mousse de chocolate.
Refrigere el bizcocho durante unas horas para que cuaje.
¡Disfruta de este celestial pastel navideño que seguramente sorprenderá tu paladar!

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