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Rocía la mezcla sobre las paredes de la taza del inodoro y déjala toda la noche. Por la mañana, frota las manchas con una escobilla y tira la cadena, verás que tu inodoro volverá a estar blanco. No utilice esta mezcla sobre superficies de piedra natural o mármol.
El agua oxigenada también puede ser un gran aliado en el hogar, por lo que se utiliza no sólo para desinfectar heridas sino también para la limpieza. Lo único que tienes que hacer es mezclar un poco de bicarbonato de sodio en un bol y luego agregar un poco de agua oxigenada. Necesitas una crema muy espesa. Luego extiende la mezcla sobre las manchas y déjala toda la noche y luego límpiala con un cepillo por la mañana. Finalmente, todo lo que tienes que hacer es tirar de la cadena.
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Incluso la sal de mesa más simple y gruesa puede ser una valiosa ayuda contra la suciedad del inodoro. Así que toma un puñado de sal y mézclala con un poco de detergente líquido para lavavajillas. Necesitas una mezcla muy densa y compacta. Extiende este limpiador casero sobre la mancha y déjalo reposar durante varias horas, luego frota con el cepillo del baño y retira el agua.
Lo único que tienes que hacer es seguir estos sencillos consejos para tener siempre un inodoro muy blanco y brillante que repele la suciedad.
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