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Los tomates son una opción popular entre los jardineros domésticos y para producir una cosecha abundante se requiere algo más que plantar y regar. En esta guía completa, lo guiaremos a través de los pasos para cultivar tomates rápidamente y asegurarnos de que produzcan frutos grandes y jugosos. Además, exploramos un método de aderezo único que utiliza ácido salicílico, un regulador natural del crecimiento de las plantas que se encuentra en la aspirina.
Paso 1: elija las variedades de tomate adecuadas
Elija variedades de tomate que se adapten a su clima y espacio. Las variedades determinadas son excelentes para espacios compactos, mientras que las variedades indeterminadas producen durante toda la temporada.
Paso 2: Comience con semillas o plántulas de calidad
Ya sea que comience con semillas o plántulas, asegúrese de que provengan de una fuente confiable. Las plantas que están sanas desde el principio crean las condiciones para una cosecha exitosa.
Paso 3: Proporcione suficiente luz solar
A los tomates les encanta la luz del sol. Plantéelos en un lugar que reciba al menos de 6 a 8 horas de luz solar al día.
Paso 4: use tierra bien drenada
Asegúrese de que la tierra esté bien drenada para evitar que las raíces se encharquen. Agregue materia orgánica como abono para mejorar la fertilidad del suelo.
Paso 5: Riegue sabiamente,
el riego constante es crucial, especialmente durante los períodos secos. Riega la base de las plantas para evitar mojar las hojas, lo que puede provocar enfermedades.
Paso 6: fertilizar regularmente
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