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Una cama con olor fresco y una almohada limpia y cómoda es una de esas cosas de las que nadie se cansa. Lamentablemente, cuando pensamos en cambiar la ropa de cama con frecuencia, es bastante raro que la gente se tome el tiempo de limpiar la almohada correctamente. Pero incluso con una funda protectora, los fluidos corporales y otros tipos de sudor entran en la almohada y hacen que se ponga amarilla. ¡Aquí hay algunos consejos que le ayudarán a remediar la situación!
Una almohada sucia, un riesgo para la salud
Tenemos que admitir que después de un día duro, lo más placentero es meterse en sábanas calientes y quedarse dormido sobre una almohada con olor fresco. Sabiendo que la falta de sueño puede tener efectos devastadores en tu salud, es obvio que el estado de tu ropa de cama es un factor importante en tu bienestar. Si todavía no estás convencido, debes saber que una almohada sucia puede provocar problemas de salud. De hecho, y como confirma el doctor Frédéric Saldmann a France Tv Info, una almohada puede ser un auténtico caldo de cultivo para las bacterias. Por lo tanto, limpiar tu almohada es una necesidad si te preocupas por tu salud. Si no sabes por dónde empezar, que no cunda el pánico, ¡te ofrecemos 3 consejos que dejarán tu almohada blanca como la nieve!
Descubre estos 3 consejos que dejarán tu almohada blanca como la nieve. Fuente: Receitas Naturais
Primer consejo: ¡bicarbonato de sodio y vinagre blanco!
Es mejor que las bacterias y otras polillas estén en guardia; El bicarbonato de sodio y el vinagre blanco son productos domésticos que ya no es necesario introducir. El bicarbonato de sodio es un producto con múltiples usos en el hogar que siempre viene bien tener en casa. Lo mismo ocurre con el vinagre blanco que se sirve. Por este motivo es beneficiosa, las siguientes cantidades:
– Media taza de vinagre blanco;
– Media taza de levadura en polvo.
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